Boeing sigue un proceso riguroso y disciplinado desde las fases iniciales de un programa hasta la entrega del avión y durante toda su vida.

Este proceso "acotado" para la propuesta de un cambio empieza cuando los ingenieros de Boeing esbozan una solución que incluye el estudio de todos los requisitos de seguridad, peso, medidas de rendimiento técnico y configuración. La solución propuesta se somete entonces a más de una docena de revisiones acotadas individuales, que son revisiones detalladas realizadas en intervalos programados por los líderes del programa en colaboración con los expertos técnicos, funcionales y específicos en la materia en cuestión.

Los expertos externos también realizan sus aportaciones: los máximos dirigentes de otros programas de Boeing, responsables y directivos de Boeing ya jubilados, y proveedores comparten su experiencia para garantizar un diseño de un avión seguro y en condiciones de aeronavegabilidad. Las revisiones cubren los requisitos, la configuración y rendimiento del avión, pruebas y certificaciones, planes de fabricación, proveedores y socios, tecnología y planes integrados del programa.

Una vez que se aprueba una propuesta, el equipo de ingenieros trabaja con varias organizaciones y socios proveedores. Se convoca una comisión específica para revisar la valoración del impacto con el fin de garantizar que se han identificado todos los grupos y que estos han realizado sus aportaciones oportunas. Sólo cuando se haya terminado este proceso se toma la decisión de si proceder o no con un cambio en el diseño.

Para un programa de desarrollo, el proceso comienza durante la fase de desarrollo del producto, cuando los ingenieros definen el rendimiento, los sistemas y los requisitos físicos y estructurales. Cuando es necesario hacer un cambio en un avión que ya está en producción, el proceso de certificación comienza con la solicitud de cambio o la autorización del mismo.

El proceso continúa una vez que el avión entra en servicio. Las comisiones de revisión técnica del programa junto con los ingenieros jefe del proyecto y los jefes de flota controlan regularmente la flota en servicio para evaluar su comportamiento y detectar cualquier problema operativo. Para encontrar soluciones a problemas que surgen, se realizan revisiones técnicas detalladas en coordinación con los clientes, las agencias regulatorias y el resto del sector — incluso con los competidores en caso de problemas de seguridad.

Boeing está sujeta a la autoridad y la supervisión regulatorias de la Administración Federal de Aviación (FAA, por sus siglas en inglés) a lo largo de todo el largo proceso que culmina en el lanzamiento de un nuevo programa o de un modelo derivado. Esta interacción disciplinada es esencial para que todo cambio en el diseño pueda avanzar.

Los procesos de certificación se detallan en el Título 14 del Código de Regulaciones Federales (CFR, por sus siglas en inglés) apartado 21. Un avión no puede entrar en servicio si el fabricante no ha demostrado ante la FAA que tal avión cumple todos los requisitos de certificación.

La seguridad de la tripulación y los pasajeros del avión es la consideración principal cuando los ingenieros de Boeing desarrollan un nuevo avión o un modelo derivado. La seguridad es el valor fundamental que inspira todo lo que hacemos, como personas, como compañía y como sector. Nuestra misión es conectar personas, culturas, economías, ideas y lugares de forma segura y eficiente. Para eso nos esforzamos cada día en Boeing.

En ocasiones, los cambios en los requisitos de la aerolínea o de los pasajeros, en los reglamentos relativos a la aviación o al medio ambiente, y los avances en tecnología justifican la creación de un avión totalmente nuevo. Pero con frecuencia el mejor procedimiento es actualizar un modelo de avión que ya existe. Eso permite que los avances tecnológicos y la innovación se puedan aplicar en menos tiempo.

Los modelos de avión derivados siguen el mismo proceso riguroso y acotado en su desarrollo, y se les somete al mismo nivel de escrutinio y valoración de ingeniería como si se tratara de un programa totalmente nuevo. Cada cambio está sujeto a un sólido proceso de debate, análisis y pruebas. En el caso del 737 MAX, se dedicaron años de trabajo y pruebas a los cambios que se realizaron en el avión.